Siguiendo con esta (ahora) serie de notas respecto a la mediación, redactadas por "yo", un verdadero maestro en el arte de la etiqueta y las buenas costumbres, voy a pasar a explicarles como calmar los nervios cuando la otra persona se encuentra irascible ó, en un caso peor, totalmente iracunda.

Es muy importante el uso de buenas palabras, un tono de voz suave y siempre poner la otra mejilla. Debemos mantener siempre la calma, aunque estemos perdiendo por un gol, el otro nos festeje en la cara y diga cosas como "ja, parecemos el barcelona" (y en realidad se asemejen más a un grupo de momias en mal estado de conservación que tienen dos "pieses" derechos), NUNCA PERO NUNCA hay que recurrir a la violencia verbal y/o física. Es lamentable ver situaciones donde la gente pierde el control y emite una serie de improperios llenos de violencia y "mala leche", inclusive involucrando a personas que no participan directamente en el conflicto, como las madres, hermanas, una lora...¿que culpa tienen esas pobres hembras? ¿hasta adonde va a llegar la humanidad?

Ahhhh, los insultos, o como algunos los llaman. "mejoradores de frases". ¿que sería de la vida sin los insultos? Siempre buscamos recurrir a uno, porque son aquellos que disparan un conflicto, es como tirarle un fósforo encendido al Burrito Ortega, todos sabemos como va a terminar. Chicos, nunca recurran a un insulto a menos que quieran meter la pata y que se vaya todo "a la mierda". Te lo digo yo, que se mucho de esto.

Bueno y como es ya costumbre, los dejo con un segmento de una película que siempre uso para ejemplificar un momento de tensión donde se resuelve todo con cordialidad. Noten la calidez humana del personaje, lloro cada vez que miro esta película.