Cuenta la historia -o mas bien la cuenta Stallone-, que en la casa de Stallone se desarrollaba una fiesta, donde estaban invitados Seagal y Van Damme. El gordo Seagal se tomó unos tetras de más, y se puso a sacarle el cuero al belga, que no sabe pelear bla bla, que no pega una bla bla, que yo lo desarmo bla bla. En esto cayó Van Damme totalmente loco, papeado y cocainiminininninizado, y lo quizo cruzar al gordo, el cual optó por el camino inteligente y huyó como dice bien escribido en la biblia de los ninyas. 

Acá un videito que muestra como fué (aunque omitieron detalles importantisimos):